Microcuentos
El mendigo bebió el vaso de un trago. La muchedumbre lo rodeaba esperando que se recomponga. Sentado en el cordón de la vereda, con parsimonia, el hombre los miró a través del cristal del vaso. Vio sus caras grotescamente deformadas, sus expresiones ridículas. Y ya no se sintió tan mal.
------------------------------------------------------------
Ella cruzó la calle, lo saludó e insistió en que eran viejos amigos. Él aseguró no reconocerla y se disculpó con una tibia sonrisa. Cuando la mujer se alejaba, el hombre la miró con desdén, repitiendo entre dientes: María, María, María, María.
------------------------------------------------------------
La cripta indicaba: “Aquí yace uno que no fue feliz”. Nadie conoce su nombre, pero si sus sensaciones.
------------------------------------------------------------
Se sentó en el último asiento doble, del lado del pasillo, junto a una bonita chica que miraba distraida por la ventanilla. El colectivo frenó bruscamente. Sus muslos se rozaron accidentalmente. Sintió algo en su pecho. Algo inexplicable, grato, casi pasional. Ella se movía inquieta, pero no se apartaba.
------------------------------------------------------------
Ella cruzó la calle, lo saludó e insistió en que eran viejos amigos. Él aseguró no reconocerla y se disculpó con una tibia sonrisa. Cuando la mujer se alejaba, el hombre la miró con desdén, repitiendo entre dientes: María, María, María, María.
------------------------------------------------------------
La cripta indicaba: “Aquí yace uno que no fue feliz”. Nadie conoce su nombre, pero si sus sensaciones.
------------------------------------------------------------
Se sentó en el último asiento doble, del lado del pasillo, junto a una bonita chica que miraba distraida por la ventanilla. El colectivo frenó bruscamente. Sus muslos se rozaron accidentalmente. Sintió algo en su pecho. Algo inexplicable, grato, casi pasional. Ella se movía inquieta, pero no se apartaba.
19 Comments:
qué cosa eso de *rozarse*, no? aunque sea un codo. Y ahcer todo lo posible por no perder el contacto.
Me ha pasado.
By Loli, at 9:38 a. m.
Tan mala era María?
El de la cripta no lo entendí. (sorry, me cuesta ¿vio?)
El del colectivo está bueno.
Saluditos
Agus
By Anónimo, at 10:35 a. m.
Ah, muchacho. Cada vez más sutil.
By Anónimo, at 10:36 a. m.
Son como retazos de vida. Ok
By Anónimo, at 10:54 a. m.
Loli: ¿En qué colectivo viaja?
Agustina: después te explico
Duque: no lo crea
Dino: gracias
By Scaramouche, at 1:35 p. m.
No, después no. Ahora. ¡Ya!
By Anónimo, at 1:40 p. m.
No Scaramouche. No me ha sucedido en colectivos. Me sucedió con mi J, en un bar. Los dos sentados uno a lado del otro y en un (buen) movimiento quedamos rodilla con muslo.
Llegó un momento en el que ya dolía, hormigueaba, molestaba, casi gangrena.
Pero duró toda la noche.
By Loli, at 2:23 p. m.
El del colectivo, lo más. Confieso, soy un toquetón.
By Anónimo, at 3:17 p. m.
lo aplaudo, scaramouche, y le digo hola.
llegué a pensar que el título del blog me lo robó, pero apuesto a que se trata de una deliciosa sintonía.
porque, porsupuesto, la vida está en otra parte.
saludos.
By Anónimo, at 3:21 p. m.
No villano, eso es ser "rozador"
By Loli, at 3:38 p. m.
Loli: ¡Que situación! La imagino incómoda, pero no tanto. Una pregunta: ¿cómo se sostiene una conversación en la mentada circunstancia?
Agustina: Después es después. ¡Camine a cucha!
Villano: No me extraña. Usted es un pervertido, pero honesto.
Dholo: Hola, bienvenida. El nombre del blog es en homenaje a Milan Kundera. Su libro "La vida está en otra parte" me desnucó.
By Scaramouche, at 3:40 p. m.
Jeje. Soy algo más que un rozador. Aunque me haya comido algún sopapo por eso.
By Anónimo, at 3:53 p. m.
En ese caso éramos 4, por lo que la ÚNICA conversación aceptable (como para seguir manteniendo el roce) era con los otros dos.
By Loli, at 3:58 p. m.
Estos cuentos cortitos confirman una vez más lo que ya le dije tantas veces. ¿Para cuando el segundo libro? Somos muchos los ansiosos.
By Anónimo, at 4:27 p. m.
Iturri, póngase en la cola. Yo estoy primera.
By Anónimo, at 4:31 p. m.
Villano: Usted es un cochino.
Loli: Imagino que el roce es con alguien que sí, pero no.
Fernando: Se agradece.
Agustina: ¡Camine a cucha!
By Scaramouche, at 4:49 p. m.
Cochino no. Disfruto de la vida.
By Anónimo, at 6:15 p. m.
¡oh, no!
entonces fue milan quien me lo robó.
no lo he leído.
desde ya, va a la lista de pendientes.
By Anónimo, at 2:52 p. m.
Cuando puedas leelo. Te va a encantar. Es la historia de un joven poeta en la Checoslovaquia post guerra. Muy interesante porque se puede traspolar a cualquier lugar y cualquier época.
By Scaramouche, at 6:49 p. m.
Publicar un comentario
<< Home